MARINE, EXPLOSIVO SINGULAR

MARINE,  EXPLOSIVO SINGULAR. MARINE ES EL BIG BANG. 

Martin Dominguez, reelegido Presidente del Club Internacional de Prensa.

Javier Martin-Dominguez, reelegido Presidente del Club Internacional de Prensa.

La corresponsal de la agencia china Xinhua, Junwei Feng, se integra en la Junta.

Juan Cacicedo, nuevo tesorero de la asociación.

MADRID.- El Club Internacional de Prensa ha reelegido como Presidente a Javier Martín-Domínguez, que dirigirá dos años mas la asociación de periodistas españoles y corresponsales extranjeros que cumple ya 55 años de vida. 

En la nueva Junta Directiva se integra la corresponsal en España en la agencia china Xinhua, Junwei Feng, que recibió el premio del CIP a la mejor corresponsal extranjera hace dos años. Juan Cacicedo, vicesecretario general y director de comunicación del Circulo de Empresarios,es el nuevo tesorero de la asociación.

Javier Martín-Dominguez, presidente del CIP desde hace dos años,  fue corresponsal de TVE y de Radio Nacional en Washington y Nueva York durante una década, así como corresponsal para Extremo Oriente de La Vanguardia, con base en Tokyo. Ha sido secretario general y director de desarrollo de Televisión Española y  director del Festival de Cine de Sevilla entre otros puestos. Director de documentales,  colabora en distintos medios españoles e internacionales.

Se mantienen en sus puestos de la Junta los vicepresidentes Adela Mac Swiney, corresponsal de la agencia mexicana Notimex, y el periodista Miguel Angel Sacalagua. Completan la Junta Directiva Jose Bodas, secretario,  Muriel Feiner, Carmen Chamorro, Monica Touron, Abuy Nfubea, Carmen Enríquez,  Ana Vaca de Osma y Junwei Feng. Así como los presidentes de la Asociación de Periodistas y escritores árabes en España, Kamal Halawa, y de la Asociación de Periodistas Iberoamericanos Sully Fuentes. 

El Club Internacional de Prensa es un organismo clave para facilitar la comunicación sobre España a los corresponsales extranjeros y sirve de plataforma informativa para los temas de actualidad de trascendencia tanto de España en el exterior como de los cuestiones internacionales en España. Cuenta con mas de doscientos miembros  y cada año hace entrega de sus codiciados premios a los profesionales e instituciones mas destacados del mundo periodístico.

ESPEJOS EN EL JARDIN. Ais y Diezma en el Botánico

ESPEJOS EN EL JARDIN.

Ais y Diezma en el Botánico

Por J. Martín Domínguez

            Pasear el otoño en los jardines del Botánico es el mejor ejercicio para armonizar los sentidos, y muy especialmente el de la vista, antes de que el invierno nos lleve a la monotonía. La gama de rojos, amarillos, ocres, verdes y demás colores se estira hasta llenar una paleta sin limites. Debe llevar al éxtasis a los pintores o al paroxismo. Este otoño madrileño tan poco amigo de las aguas le sienta bien a este pequeño paraíso donde cada metro andado es un paso mas hacia la maravilla vegetal. Lo mejor que se puede hacer aquí es mirar. Mirar sin parar. Descubrir variedades desde arbolotes inasibles a pequeños bonsáis también coloreados de otoño. Meterse en las estufas y creerse en la selva, la jungla o un desierto. Y perderse finalmente entre los historiados paseos hasta encontrar una puerta qun nos mete en otra algarabía de formas y clores: las galerías de exposiciones, donde ahora presentan sus caprichos artísticos José Ramón Ais ( Parque natural), y Jorge Diezma (El florero en flor)

            Hay que ser muy atrevido- un don común a los artistas –para presentarse en este paraíso natural con flores y paisajes artificiosos, que quieren competir o al menos superponerse con el bien natural que arropa en el exterior sus propuestas. Pero sin entrar en desigual batalla, ambas salen triunfantes de este maridaje con la naturaleza, con procesos que buscan la belleza, recrearla y ofrecerla a nuestros ojos como un jardín.

            La serie Paisaje Natural, de Ais, esta compuesta por doce fotografías, “en las que se ofrecen diferentes vistas de un parque natural ficticio”. La perfección fotográfica es tal que uno daría por reales estos mundos naturales. Pero en el fondo y en la forma son collages de fotografías hechas en el natural y recreadas hasta componer un nuevo paisaje, que bebe en las fuentes de la composición clásica y de la tradición pictórica. El artista explora los mecanismos de construcción de nuestra mirada sobre la naturaleza, aunque dice que su pretensión es la de intentar ofrecer la sencilla experiencia sensorial de un paseo.

            Abigarrada, plena y monumental la imagen de estos parques roza lo sublime; de tal conglomerado natural sentimos el fulgor del éxtasis con el elemento paisaje como figura metafórica y espiritual en la línea mística de un san Juan de la Cruz.

            Asomadas también al botánica, las pinturas de Jorge Diezma buscan otro juego con el espectador. No es baladí su titulo de El florero en flor. Naturaleza seleccionada, aprendida, recolectada para formar un bouquet que nos amenice el ojo. Así es recogida y representada, con ese trabajo imposible para todos que es el de pintar la flor. La representación realista tienen aquí un punto de figa que es el estiramiento del lienzo con pinceladas abstractas que estiran los colores por las paredes y crean un nuevo campo de visión para la flor del florero. Estas propuestas de naturalezas muertas, tan vivas de color, se salen de la pared y quieren jugar a maridarse con los jardines que asoman por los grandes ventanales de la sala del Botánico. Aquí, en la obra de Diezma, las flores ya no son flores, sino pintura de lo bello que crea nuevos espacios, nuevas dimensiones, nuevas sensaciones en un campo de juego que supera al jardín. La flor se nos mete dentro, es un pensamiento, un juego en las pupilas, que nos hace dudar de que es la naturaleza y lo natural, cual es la flor y cual el florero que la contiene.

            Colocar espejos en un jardín siempre es un juego de alto riesgo, del que salen victorioso los actuales paseantes del Jardín Botánico.

Javier Martín-Domínguez

COIXET Y EL UNIVERSO FEMENINO

 

Vender libros es abrir mundos. Las tapas de una novela o un ensayo no cierran nada. Son ventanas que invitan a mirar nuevas perspectivas sobre la vida. Hay quienes se esfuerzan en hacer participe a los demás del don del descubrimiento; pero siempre suelen toparse enfrente con los censores ávidos de cortar el paso a la inteligencia, a la verdad, a la experimentación.

Esta lucha inesperada (para los ilusos) entre el bien de la lectura y el mal de la envidia la cuenta con maestría Isabel Coixet en su ultima película. La Librería. Ahora que el el libro y las librerías empiezan a quedarse como iconos del mundo predigital, Isabel sitúa la historia en un pueblito inglés en el que una joven viuda- sola, con recuerdos -intenta la gran aventura de fomentar otros mundos leídos a sus habitantes abriendo una tienda de libros. Su escaparate será una doble atracción , para ávidos lectores y parta envidioso. 

Maestra en el rodaje, Coixet nos regala una particular belleza en las estampas de esta historia tan suave como finalmente dolorosa, aunque el epilogo encierra tanto una derrota como una sutil venganza.

Siempre parecen perdedoras estas heroínas sin final feliz que retrata Isabel en sus ultimas películas. Quizá estableciendo en el terreno del realismo- la mujer no ha conseguido ni remotamente la igualdad-, o quizá también porque historias en las que se resalta que el ultimo tabú esta aún por conquistar. Un exposé de las batallas de nuestro tiempo situadas en un mundo de película, que nos hacen gozar, pensar, dudar y sentir lo mejor del ser humano y el contrate con la envidia y la maldad que inevitablemente parecen surgir ante el impulso creador de los demás. 

Dave Brubeck Quartet - La Paloma Azul (The Blue Dove) Cancion de NY

Incluida en Cancion de Nueva York (The only living boy in New York)

Dave Brubeck on piano, Paul Desmond alto sax, Joe Morello, drums, and Eugene Wright on bass, are seen five months before the group broke up