"Las «Cartas de Tokio» de Javier Martín Domínguez guardadas en una caja conservan la amistad entre el corresponsal de TVE y sus amigos japoneses. Se incluyen en esta exposición como símbolo de un intercambio y de una comunicación entre sujetos de diferente origen que comparten destinos y registran vivencias en y de un lugar al mismo tiempo.
EXPOSICION EN CASA ASIA. BARCELONA
CARTAS
DE TOKIO
Correspondencia
de
Masaru
Hagiwara y Javier Martín-Domínguez
Nada
debe ser obvio. Todo debe ser repensado. Esta es la regla de trabajo para un
seguidor de las vanguardias. Ni un día puede ser igual a otro. Mi amigo Masaru
llegó a hacer un calendario en el que cada fecha del año estaba dibujada de una
forma diferente. Tampoco una carta podía ser una mera carta en manos de Masaru
Hagiwara.
Artista
y diseñador gráfico, fundador de Hahiboh Graphics y después de la compañía
Starka con Mari Kobayashi, vivió en el inspirador Nueva York de los años
ochenta, donde nos conocimos.
Volvimos a compartir
amistad en Japón, donde viví a finales de esa década como corresponsal de La
Vanguardia de Barcelona. Su estudio en Minami-Aoyama fue mi segunda casa en
Tokio.
Nuestra
correspondencia entre Tokio, Nueva York o Madrid no quedó limitada a meras
cartas. Cada envío de Masaru desafiaba el trabajo habitual de los carteros. En
lugar de sobres, ponía en el correo un trozo de bambú, cajas creadas al efecto,
carpetas de plástico transparentes o colocaba sellos sobre una polaroid. Incluso
cuando recurría al sobre, lo pintaba o disponía los sellos de una forma
singular. Hasta la selección de los sellos la cuidaba primorosamente, buscando
los mas especiales o mas apropiados para el mensaje o la época del año en una tienda cercana a Shibuya.
Así, una tras otra, Masaru iba haciendo de la carta un arte objetual que sorprendía
al receptor y descolocaba a las oficinas de correos. Desde mediados de los
ochenta hasta iniciado el nuevo siglo siguieron llegando a mis distintos
domicilios esas singulares cartas , que conservo como recuerdo de un tiempo y una
amistad que ya se ha hecho eterna con su desaparición. En los parties de Nueva
York, jugábamos a seleccionar una persona, para darle una ocupación y situarle
en otra época histórica. Yo diría: "Masaru Hagiwara, artista, Paris, años surrealistas”, escrito con vaho en una carta/nube enviada al cielo.